jueves, 6 de abril de 2017

Sistema respiratorio y la importancia en paciente quemado.


¿Qué es el aparato respiratorio?

El aparato respiratorio es el encargado de que el aire penetre desde el exterior y de realizar el intercambio de gases con la sangre. Luego, el sistema circulatorio llevará el oxígeno a todo el organismo.



¿Cuál es la función del sistema respiratorio?

La función principal del aparato respiratorio, es obtener el oxígeno del aire para llevarlo a los diferentes tejidos y expulsar al exterior el dióxido de carbono procedente del metabolismo celular. El oxígeno inspirado con el aire es el combustible que las células del cuerpo precisan para convertir las materias nutrientes de los alimentos en la energía necesaria para que realicen correctamente sus funciones.






Insuficiencia respiratoria en pacientes quemados.


Las complicaciones respiratorias en el paciente quemado son con frecuencia graves y junto con las infecciones, constituyen actualmente la principal causa de muerte en los pacientes. Los quemados que requieren ingreso hospitalario presentan lesión por inhalación. 

La lesión por inhalación se asocia además a una importante causa de enfermedad dando importancia el principal motivo de ventilación mecánica el paciente quemado.

Las complicaciones respiratorias en el quemado pueden aparecer a diferentes niveles, en diferentes tiempos y formas. Así, podemos encontrar, lesión térmica de la vía aérea, lesión química pulmonar por tóxicos inhalada, restricción pulmonar por disminución de la distensibilidad de la pared torácica secundaria a la quemadura, toxicidad sistémica por la inhalación de tóxicos liberados durante la combustión, o incluso fallecimientos inmediatos secundarios a la asfixia.



La lesión directa por calor de la vía aérea se limita al tracto respiratorio superior, ya que el aire seco tiene un bajo calor específico y es enfriado de forma muy efectiva en la vía aérea superior. El calor intenso provoca apnea refleja, protegiendo la vía aérea. La inhalación de vapor de agua, con un calor específico 4000 veces superior al aire seco, sí puede dañar la vía aérea inferior.

Lesión térmica

La lesión térmica de la vía aérea produce inflamación y edema en cara, orofaringe y laringe (especialmente en cuerdas vocales), incrementando la producción de secreciones. Estas lesiones inflamatorias progresan en las primeras 24-48 horas, y pueden ser portadores de infecciones hasta generar un estrechamiento crítico de la vía aérea. La inhalación de gases tóxicos hidrosolubles también favorece el edema en vías altas.







Lesion química.

Presenta una papel relevante en la lesión por inhalación en el paciente quemado. El humo es una mezcla de gases, vapores, pequeñas gotas líquidas, humo propiamente y partículas carbonáceas, generadas mediante combustión (en presencia de oxígeno) o pirólisis (en ausencia de oxígeno) por aumento de temperatura.

Los productos tóxicos generados en un incendio dependen del tipo de combustible, temperatura y presencia de oxígeno. Se han detectado más de 50 productos diferentes en las víctimas de incendios, siendo los más frecuentes monóxido de carbono (CO), aldehidos (acroleína), ClH, cianuro, óxidos de nitrógeno y CO2. Existe un sinergismo entre la mayoría de estos productos, por lo que pueden provocar toxicidad aun a bajas concentraciones.


La afectación de la mucosa traqueo-bronquial puede incluir un ámplio espectro de lesiones, desde simplemente edema, con disfunción ciliar, hasta una completa necrosis (muerte de tejido) y desprendimiento del epitelio con ulceración y hemorragia. La pérdida del epitelio traqueobronquial y la exposición de la membrana basal inducen una respuesta inflamatoria con abundante exudado, rico en proteínas y polinucleares con sus productos de degranulación.


Lesión química pulmonar por tóxicos inhalada

La inhalación de sustancias tóxicas con efecto sistémico, presenta una trascendencia clínica relevante que debe ser tenida en cuenta en todos los casos de inhalación. Entre las sustancia con mayor relevancia patógena destacan el monóxido de carbono y cianuro.

El tratamiento de la intoxicación por CO incluye la retirada del paciente de la fuente de CO, soporte vital, y fundamentalmente la administración lo más precoz posible de oxígeno al 100%, sin esperar confirmación toxicológica. 

Atención extrahospitalaria

El manejo de la vía aérea en el paciente quemado requiere del conocimiento y experiencia de la evolución de las lesiones por quemadura, hacer una intubación adecuada y oportuna con pleno conocimiento de todos los recursos existentes para vía aérea difícil, escogiendo según el momento en la evolución de la quemadura, el recurso adecuado para establecer una vía aérea definitiva.

 Comprende desde la protección del personal que va a participar en el rescate de la víctima, incluido el personal sanitario, hasta el traslado definitivo del paciente al hospital. En esta etapa se distinguen por su importancia los siguientes pasos:
  •       Retirar a la víctima de la fuente tóxica y apagar tejidos que puedan estar combustionando todavía. Garantizar la permeabilidad de la vía aérea.
  •           Comenzar a administrar oxígeno al 100% con mascarilla y reservorio, si fuera necesario realizar entubación endotraqueal.
  •          Reanimación cardiopulmonar si el estado del paciente lo exige. Identificar el tóxico, o al menos tratar de hacerlo.
  •           Valorar y si es posible comenzar a aplicar antídoto específico.
  •          Traslado al hospital.




Bibliografía

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·         Carbon monoxide poisonings associated with snow-obstructed vehicle exhaust systems--- Philadelphia and New York City, January 1996.